
La policía de Río Negro y SENASA decomisaron este jueves 7.800 kilos de costillares que iban en un camión batea. Serán incinerados.
Ocurrió en la madrugada en el control puente Dique. Los uniformados recibieron un alerta desde el puesto Fitosanitario ubicado en “el cruce”. Se supo que el camión era custodiado por un auto, habían intentado controlarlo y se dio a la fuga.
Hasta el momento no hay información oficial sobre el hecho. El infractor sería un empresario de la carne del Alto Valle. La carne era transportada sin las normas de higiene correspondientes y sin cadena de frío.